Se aproximan, ya vienen
Y están armados,
Con mucha rabia, odio,
Inconsciencia y desagrado.
En su mente obtusa
Somos sus enemigos,
Ignorando que esta lucha
Es por un mismo camino.
¡Apuntan a mi cabeza!
¡Apuntan a mi pecho!
No saben que mi alma resuena
Y así reclamo mis derechos.
Alzo fuerte mi voz
Levanto alto mis manos,
En esta batalla absurda
Porque todos somos hermanos,
El gas seca mi garganta,
va nublando mi visión
Pero ¡ES MI LUCHA LA QUE GRITA!
Y mi guía es el corazón.
Se escuchan detonaciones
mi bandera las absorbe
Y un escudo impenetrable
De coraje con renombre.
Me falta el aire
Se me acaba la fuerza,
Pero mi espíritu arrecia
Y me envuelve en resistencia.
Mi rosario en mi cuello,
mi amor a Dios y a ÉL mi alabanza
indestructibles y grandes armas,
junto con pasión y esperanza.
Pues ¿cómo no rescatar?
Lo que tanto se ama,
¿Cómo dejar morir?
A mi patria soberana.
No estamos solos
En cada batalla dejamos estela
Nunca dejaremos de luchar
Por una mejor VENEZUELA.
Por una mejor VENEZUELA.
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